La carne ecológica de cerdo es más saludable
¿En qué aspectos?
- Somos lo que comemos. Alimentamos a los animales exclusivamente con harina de cereales ecológicos y complementamos la dieta con forraje ecológico certificado.
- Sin residuos químicos. La medicación preventiva está prohibida y la medicación paliativa está muy restringida y controlada. Ofrecer condiciones naturales a los animales es garantía de su crecimiento saludable.
- Ácidos grasos de calidad. La alimentación natural y las condiciones de cría nos permiten obtener un perfil muy superior de ácidos grasos no saturados.
- Lactaciones largas. ¿Que hay más saludable que tomar leche de la madre durante el período adecuado? Nuestros lechones se alimentan de leche de sus madres durante un mes y medio, hecho que favorece enormemente el buen desarrollo inmunitario del pequeño y lo convierte en un animal fuerte y saludable.
La carne ecológica de cerdo es más sabrosa
¿Por qué es más sabrosa?
- ¡Mmm..! Alimentación saludable, condiciones naturales, una raza excelente… Estos son puntos clave que nos permiten obtener una carne con un sabor inigualable.
- ¡Qué tierna! Nuestros cerdos tiene espacio para andar y acceso permanente al aire libre. Esto favorece la distribución de grasas de la carne. Obtenemos una carne más infiltrada, más tierna y mucho más sabrosa, que la cocina y el paladar agradecen.
La producción porcina ecológica es, también, más responsable
¿Por qué motivo?
- Más bienestar animal: para nosotros, éste es un punto fundamental. Estamos orgullosos de decir que producimos de la forma más justa que podemos hacia ellos. Los cerdos tienen total libertad de movimiento, acceso permanente al aire libre, más espacio disponible por animal y la mínima manipulación durante el proceso de producción. Así que viven en unas condiciones muy cercanas a su estado más natural, respetando sus ritmos y sus conductas mas innatas.
- Favorece al medio ambiente: son producciones lentas, con impactos menores en el medio ambiente, hecho que favorece la producción agraria ecológica, con la aportación de materia orgánica de calidad para abonar los cultivos.
- Positiva para el consumidor: respeta al consumidor porque pone a su disposición un producto sano, de calidad, del territorio y hecho con amor… ¡Y hoy en día esto no tiene precio!
- Mas comprometida con el productor: consumir carne ecológica es contribuir a que una pequeña explotación, generalmente familiar, pueda desarrollar una actividad rural, que genera riqueza directamente en el territorio donde se desarrolla, y que permite el mantenimiento de las poblaciones rurales y de la conservación del territorio.
Bienestar animal, calidad y seguridad alimentaria, sostenibilidad, territorio… Todos estos aspectos configuran, para nosotros, un reflejo de nuestra razón de ser.